sábado, 24 de octubre de 2009

Abstract de la ponencia de Israel Ramírez

1970: contexto y revolución en la joven poesía mexicana
Si los discursos hegemónicos iniciarán en 1971 su derrumbe al compás de la música que se escuchó en Avándaro, desde la literatura también se cuestionarán los resultados –políticos, sociales y estéticos– que se heredan del nacionalismo, la vanguardia, la tradición y la revolución. Los poetas que inician sus publicaciones en esta década, sensibles a fuerza del desencanto y la represión, publican animados por la certeza de que en la política y en la cultura, la revolución se ha institucionalizado.
Una década en la que muere Becerra e inicia sus publicaciones Jaime Reyes o Ricardo Castillo, nos reitera la certeza de la pérdida, pero también la instauración de nuevas dicciones en la poesía mexicana. En esta ponencia nos daremos a la tarea de perfilar el contexto dentro del cual los jóvenes autores que publicaban en 1970 utilizan la poesía para dialogar críticamente con los discursos hegemónicos de la primera mitad del siglo XX. A partir de este contexto y gracias a la revisión de un puñado de autores representativos del periodo, se arriesgará también una reflexión sobre las constantes que aquellas tendencias estilísticas asentarán en nuestra tradición poética contemporánea.
Nombres como Orlando Guillén, Max Rojas y Ricardo Yánez son indispensables para orientar la lectura de estos momentos, pero de igual manera lo son los que integran la promoción posterior, entre ellos: Rafael Torres Sánchez, Ricardo Castillo, Samuel Walter Medina, Mara y Vera Larrosa, Arturo Trejo Villafuerte… Serán ellos los que nos permitirán explorar una de las etapas más importantes para pensar el devenir de la poesía mexicana más reciente. Son también ellos, junto con otros muchos poetas– los que habrán publicar bajo una bandera de la revolución que se pinta de juvenil subversión, de descreimiento, de política, de libertad democrática…

jueves, 22 de octubre de 2009

Abstract de la ponencia de Mariana Ortiz

LA ESPIGA AMOTINADA: UNA MIRADA SUBVERSIVA

Cinco poetas se reúnen bajo el nombre de La espiga amotinada : Juan Bañuelos, Óscar Oliva, Jaime Augusto Shelley, Eraclio Zepeda y Jaime Labastida.
La obra de este grupo converge en su decisión de dirigir una mirada atenta hacia el desastre político y social de su tiempo; la suya, es una poesía que reclama el cambio y que se asume como un principio de lucha.
Poesía combativa que busca participar activamente en la renovación de su país. El caos de la ciudad de México, la conciencia sobre el dolor de los otros, la indignación frente a la injusticia y la denuncia de la miseria que ha sido desatada, entre otras cosas, como consecuencia del fracaso de la Revolución Mexicana, son temas centrales de su propuesta.
Utilizando distintos recursos retóricos y poéticos para expresar su postura, estas cinco voces coinciden en un punto fundamental: la mirada crítica con que enfrentaron la realidad histórica en la década de los sesenta.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Abstract de la Ponencia de Jocelyn Martínez

LA IRONÍA COMO RECURSO POÉTICO-RETÓRICO EN TRES POEMAS DEL MOVIMIENTO DEL 1968
El año de 1968 dejó como legado medallas olímpicas, pliegos petitorios, estudiantes furiosos, ciudadanos muertos y escritores indignados. Se escribieron cuentos, crónicas, guiones, obras teatrales, memorias dolorosas y poemas patéticos. Entre los poetas que contribuyeron con su obra se encuentran Eduardo Lizalde, Jaime Sabines, Rosario Castellanos, Juan Bañuelos, Rubén Bonifaz Nuño, Gabriel Zaid, entre otros.
Algunos de los poemas fusionan eros y tánatos al mostrar como personajes poéticos a jóvenes parejas acribilladas el 2 de octubre entre el temor y las caricias, tal es el caso de Héctor Manjarrez y de Elsa Cross.
Asimismo, aparecen aquellos que encuentran correspondencias entre la matanza de los estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas frente a sacrificios ancestrales o a batallas prehispánicas como en el caso de Octavio Paz, Juan Bañuelos, José Carlos Becerra y José Emilio Pacheco.
Aunque algunos de los poemas son perfectamente claros y en ellos se nota la nula intención de ocultar la postura; en otros se hace uso de la ironía como recurso retórico que en una primera instancia disimula y posteriormente lleva a la burla, a la conmoción y al desconcierto. Tal es el caso de tres poemas específicamente: “Tlatelolco, 68” de Jaime Sabines, “Oh, César” de Eduardo Lizalde y “Lectura de Shakespeare (soneto 66)” de Gabriel Zaid.
Ironía es el hecho de “decir algo de tal manera que se entienda de forma distinta a la que las palabras primeras parecen indicar.” En el caso de estos tres poemas la ironía aparece mediante distintos recursos que van desde marcas como el uso de guiones largos, paréntesis, comillas y signos de admiración, hasta interrogaciones retóricas, adjetivos, frases, paradojas y oxímoron.

Abstract de la ponencia de Eva Castañeda

EL INFRARREALISMO ENTIERRA EL CADÁVER DE LA REVOLUCIÓN

El Infrarrealismo es la primera expresión poética sistemática (en tanto que actitud grupal) del desencanto existencial que significó el incumplimiento de los ideales emanados de la Revolución Mexicana. Movimiento surgido a finales de 1975, a los infrarrealistas les toca padecer el último aliento (ya fétido) del Estado nacido de dicha Revolución: la presidencia de José López Portillo, quien, con su característica egolatría, llegó a declarar: “soy la última oportunidad de la Revolución”. El sexenio lopezportillista, contexto histórico necesario para entender la actitud y la poesía “infra”, se caracteriza por una crisis galopante, una política degrada y una sociedad desgarrada. Así entonces, este grupo encarnará una actitud vital expresada como grito de angustia y concretado en una propuesta poética específica.Para los miembros de este grupo, la Revolución Mexicana ya no es tema, sino apenas el telón de fondo, donde el cadáver de la ideología político-social fenecida no encuentra sucesor posible. Ante tal desamparo, los infrarrealistas vuelven los ojos hacia su realidad social y cultural inmediata, y encuentran que es necesario el desprecio y la furia hacia dicha realidad: “Déjenlo todo nuevamente, láncense a los caminos” será el grito de guerra infrarrealista, de donde se sigue que este movimiento pretende la subversión completa del canon poético en boga, y la artillería deberá ser enfocada contra Octavio Paz, versión cultural de la dictadura priísta. Esta ponencia pretende ilustrar cómo la poética infrarrealista asume dicha actitud, en autores como Mario Santiago, Ramón Méndez y Edgar Altamirano. En su obra, el discurso lírico será un desgarramiento elaborado como ironía y radicalidad lingüística, a la vez que hace uso de una referencialidad concreta, en relación directa con la realidad degrada que los circunda, para expresar la angustia del hombre moderno y concreto.

Abstract de la ponencia de Jorge Antonio Aguilera

DE LA POESÍA COMO COMPROMISO, DE LA POLÍTICA COMO ESTÉTICA: ENRIQUE GONZÁLEZ ROJO Y LEOPOLDO AYALA

Enrique González Rojo y Leopoldo Ayala son dos autores que permanecen en el margen del canon poético mexicano. Aunque con trayectorias distintas, ambos convergen en la misma línea discursiva: la que asume el compromiso político como una presencia explícita en su obra poética. Esta postura, a la vez ideológica y estética, sirve para explicar su marginalidad. No obstante, estos poetas consiguen crear una voz lírica poderosa, donde la poesía es “poesía política, no propaganda política”, para decirlo en frase de Ernesto Cardenal. Los dos confrontan el discurso oficial sobre la Revolución Mexicana, y le oponen un nuevo sentido revolucionario, fruto de la efervescencia que existe en el ambiente sociopolítico de izquierda en los años sesenta y setenta. La presente ponencia tiene por objeto analizar las fuentes, las técnicas y los temas de donde se nutren ambos autores.
Militantes destacados de movimientos políticos surgidos en los sesenta (González Rojo en la Liga Espartaquista de José Revueltas y Ayala en el grupo Arte Colectivo en Acción), han participado activamente en diversos movimientos sociales desde entonces y hasta hoy. Marcados por esas contiendas, su poesía expresa la esperanza, el desencanto, la rabia y la lucha permanente por lograr la instauración de una sociedad más justa. Del movimiento estudiantil de 1968 extraerán tema para sendos poemas (“Yo acuso” de Ayala y el poema “XVIII” de El quíntuple balar de los sentidos, de González Rojo), pero en su poesía podemos encontrar referencias a los muy diversos movimientos sociales mexicanos y latinoamericanos en general o de las diversas luchas políticas de la época. Todo ello, reitero, asumido como un compromiso, estético e ideológico, que hace de la praxis política discurso poético revolucionario.

Abstract de la ponencia de Roberto Cruz Arzabal

LA EPISTEME FICCIONAL. FICCIÓN Y DISCURSO EN LA POESÍA DE EFRAÍN HUERTA Y JAIME REYES

Entre 1973 y 1978 Efraín Huerta escribe el poema “Amor, Patria Mía”; sumido en una estética que no pocos calificarían como posmoderna, Huerta desmonta el discurso amoroso y el discurso histórico por medio de la hibridación genérica y la intertextualidad; además de enfrentar, a manera de contrapunteo, la poesía lírica y el texto jurídico.

En 1984, Jaime Reyes publica el libro La oración del ogro. Perteneciente a una promoción posterior de la poesía mexicana, aunque con recursos textuales similares a los de Huerta, Reyes descontextualiza diversos testimonios de personajes marginados por la sociedad mexica para insertarlos dentro de la enunciación poética.

Ambos poemas incorporan textos extraídos del contexto epistemológico de la historia para, al introducirlos al contexto de la poesía y entregarlos al lector bajo esta configuración, generar una episteme fictiva que no por ello es menos poderosa que la original, al contrario, los textos tendrán ahora la posibilidad de interpelar discursiva y estéticamente al lector, serán capaces de enfrentarlo con una otredad que parecía lejana o negada desde la enunciación histórica.

Abstract de la mesa Congreso El Paso 2010

DE LA UTOPIA AL DESENCANTO. LA POESIA MEXICANA FRENTE A LACRISIS Y LA DESINSTAURACIÓN DE LA REVOLUCIÓN MEXICANA (AÑOS SESENTA Y SETENTA).

Esta mesa tiene por objeto final abordar las poéticas, grupos y estéticas que, fruto del discurso revolucionario, se dieron en México dentro de la poesía en las décadas de 1960 y 1970. Alrededor de una fecha clave como es el 2 de octubre de 1968, podemos contar a un nutrido grupo de poetas que, en relación con los sucesos históricos y sociales de las dos décadas apuntadas, asumirán el discurso lírico para oponer una visión progresista frente a la creciente paranoia del Estado Posrevolucionario. De tal suerte, en la obra de autores que van desde el grupo La Espiga Amotinada hasta el movimiento Infrarrealista, pasando por Efraín Huerta, Leopoldo Ayala, Enrique González Rojo, Jaime Reyes y otro más, podemos encontrar un discurso poético que es crítico, irónico, profundamente cuestionador del “discurso oficial” que aún subyace en la época y que se asumía como “la Revolución (Institucionalizada) en el poder”. En el fondo, Las prácticas poéticas analizadas en las cinco ponencias que integran esta mesa subvierten el propio discurso revolucionario para, consecutivamente, externar una postura ética frente a la poesía y su relación con el hombre, para poetizar la marginación y la exclusión de los individuos y movimientos en desacuerdo con el régimen o para externar el desencanto y desgarramiento que produjo el fracaso y la desinstauración de un sistema social proyectado y nunca consumado desde el fin de la Revolución Mexicana. Así, será en las generaciones de poetas que viven el 68 (aunque sea simbólicamente) donde hallaremos el último reducto discursivo de la ya mítica Revolución en la poesía mexicana.